En cuanto a su historia, se dice que las primeras gomitas datan de 1920, cuando el alemán Hans Riegel abrió su empresa de dulces; en un inicio las golosinas que vendía eran duras y sin color, pero como él mismo las fabricaba en su casa, comenzó a experimentar con otros ingredientes.
Su elaboración es colocar una olla de gelatina sin sabor, el azúcar y el agua. Llevar la mezcla al fuego y mover constantemente con la cuchara de madera hasta que empiece a hervir. Luego, añadir la gelatina con sabor y dejar hervir hasta que la mezcla espece. Mojar con agua fría un molde regular y colocar la preparación y dejar reposar durante toda la noche para que la mezcla este firme. Darle forma a las golosinas con un cortador de galletas, triángulos, cubos, corazones o las formas que prefieras (también puede usarse en un molde de formas). Pasar los caramelos por azúcar y dejarlos reposar y guardarlos en un envase de plástico completamente cerrado.